Los cuencos de cristal de cuarzo constituyen una nueva dimensión dentro del mundo de la vibración y el sonido. Están basados en la tradición del uso del sonido con cuencos de metal en el Tíbet, la India, China, Japón y otros países de Oriente desde hace cientos de años para la meditación y la sanación. Con esa finalidad han comenzado a utilizarse a finales de los años ochenta dada su enorme resonancia y poder terapéutico.
Los cristales de cuarzo pueden vibrar u oscilar de una forma regular y tienen una estructura molecular interna en espiral (muy similar a la del ADN). Esto hace que los cuencos de cuarzo tengan unas propiedades sonoras únicas. Producen una onda sinusoidal pura y crean un sonido multidireccional que se expande hasta un kilómetro de distancia y que puede durar varios minutos antes de extinguirse. "El sonido parece que va a un oído, luego al otro, luego detrás, más tarde parece que viene del suelo. ¡Es un sonido envolvente natural!"
Este sonido pasa a través de nuestro cuerpo y nos hace vibrar.
Las vibraciones producidas por los cuencos de cristal de cuarzo activan nuestras células y penetran profundamente en todo nuestro ser. Su sonido envuelve el cuerpo como una ola, proporcionando una experiencia similar a un masaje enormemente sutil o a una profunda y serena meditación. La gente que experimenta los efectos de los Cuencos de Cuarzo describen su experiencia como una gran relajación física y mental, sensación de flotar, bienestar, plenitud... Producen importantes desbloqueos en el cuerpo físico y energético, por lo que se utilizan como una importante herramienta terapéutica.
Efectos delos cuencos de cuarzo:
Llenando un Cuenco de Cuarzo con agua y activando su sonido se pueden observar también figuras geométricas en el agua. Dada la enorme resonancia del cuenco, al aumentar su intensidad el agua "salta" literalmente varios palmos por encima del cuenco por efecto de la vibración, como si estuviera en efervescencia.
Esto nos da una idea del efecto que producen estos instrumentos en el cuerpo, que como sabemos está formado en más de un 70% por agua.
Los Cuencos de Cristal de Cuarzo se utilizan en casos de contracturas musculares, roturas y otros problemas óseos. La vibración de los Cuencos "resuena" y armoniza la estructura cristalina presente también en nuestro esqueleto.
Tienen efectos positivos en casos de artrosis, problemas circulatorios, piedras en el riñón, depresiones y otras múltiples dolencias.
Cargan y potencian con su vibración esencias florales y aceites esenciales y se utilizan en la limpieza de espacios físicos.
Los Cuencos de Cristal de Cuarzo abren un importante camino en el campo terapéutico, y tienen la capacidad de transportarnos hasta el origen mismo del Sonido. Tal vez sea ese su gran legado, ser vehículo hacia ese gran Espacio, a ese gran misterio que habita en nosotros.
Las ondas del sonido producido por los cuencos de cuarzo inducen a un estado de una gran relajación (estado alfa y zeta); llevan a la mente a un estado de calma que tanto necesita el hombre moderno. El sonido de los cuencos conduce a la conciencia a un viaje interior, a un sentimiento de plenitud y vacío. Lo que los maestros zen llaman "llenarse de vacío". Nos inducen hacia el Silencio Interno en el que poder salir de los estrechos límites del intelecto para adentrarnos en la paz del alma y la experiencia de nuestro espíritu, dándonos la oportunidad de ver el mundo y a nosotros mismos con otra percepción.
Así, los cuencos de cuarzo contienen dentro de sí un poder que va mucho más allá de la mera musicalidad y que requiere tanto de nuestra apertura consciente para ser percibido como de la correcta disposición e intención para ser utilizado. Con el cuenco estableceremos una relación "personal " de corazón a corazón, de mente a mente.
Incluye maza y base.
Medida: 25cm